3.- Descripción de actividades.

 

Debido a que es considerado de mucha responsabilidad la transfusión de sangre o un  hemo componente es importante dar a conocer algunas recomendaciones generales para evitar una reacción no deseada en un paciente, entre otras recomendaciones se sugiere evitar la administración de medicamentos sobre todo antibióticos justo al inicio de una transfusión y de igual manera se sugiere suspender soluciones que no sean estrictamente solución salina isotónica y utilizar un equipo de transfusión para cada unidad de hemo componente, de igual manera es muy importante asegurar una vía venosa permeable y con flujo continuo.

Para aplicar los componentes sanguíneos es muy recomendable hacer la lista de verificación antes de abrir el puerto de salida ya que una vez realizada esta acción deberá proceder a la transfusión de inmediato o de lo contrario, dar destino final RPBI y evitar cualquier tipo de sello provisional en dichos puertos.

 

3.1. Aplicación de concentrado eritrocitario.

 

Después de recibir una indicación médica para transfundir un concentrado eritrocitario y lo ha recibido proveniente de un Banco de sangre o se encuentra almacenado en el refrigerador del servicio de transfusión, deberá identificar la ubicación del paciente dentro del hospital y deberá programar la transfusión.

Deberá llevar la unidad de concentrado eritrocitaria al lugar donde se encuentra el paciente y deberá llevar consigo de igual manera el equipo de transfusión obligado por norma para transfundir cualquier hemo componente, así como también, deberá hacer la lista de verificación que a continuación se describe:

Identificar plenamente al paciente con nombre, número de cama o habitación fecha de nacimiento, sexo, edad y si es posible médico tratante, deberá revisar que se encuentre la indicación médica escrito en el expediente clínico, incluyendo fecha y hora y tiempo para su transfusión.

Revisará el membrete que se encuentra adosado al concentrado eritrocitario para identificar plenamente la unidad cómo es nombre o identificador del donador, grupo sanguíneo y Rh, fecha de extracción, fecha de caducidad, pruebas de serología no reactivas, pruebas cruzadas compatibles, documento de respaldo y posibles eventualidades.

 

Deberá asegurarse que existe en el expediente la carta de consentimiento informado que debió integrarse al momento de solicitar la unidad, de lo contrario deberá llenarla de inmediato hacer firmar al paciente junto con uno o dos testigos y recabar la firma del médico tratante para cumplir con este requisito; es muy importante evitar proceder sin este documento médico legal.

 

Seguido, deberá obtener los signos vitales del paciente como son presión arterial, frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria, temperatura corporal y de ser posible oximetría, es muy importante considerar los valores de referencia para cada uno de estos parámetros de acuerdo al sexo y edad de los pacientes e incluso considerar alguna enfermedad o patología preexistente, en caso de obtener alguna medición que no se encuentre dentro de los parámetros o valores normales deberá notificar de inmediato al médico de Guardia y tratante, para valorar sí a pesar de esta alteración continúa con la transfusión o hasta el momento en el que el paciente tenga las condiciones ideales pueda llevar a cabo la transfusión.

 

Debe considerar que el tiempo sugerido como normal para transfundir un paquete globular oscila entre los 120 y 180 minutos, y es muy importante presentarse junto al paciente los primeros 15 minutos de la transfusión, por lo cual se evitará distracción en ese preciso momento y provocar al paciente una plática muy superficial, con el fin de apreciar si hay algún cambio provocado por la transfusión.

Deberá obtener los signos vitales después de los 15 a 20 minutos de iniciada la transfusión y se deberá hacer un comparativo; en caso de que alguno de los parámetros haya cambiado deberá suspender la transfusión provisionalmente y se avisará al médico para su evaluación clínica.

 

Cuando se obtengan signos vitales normales durante la transfusión podrá terminarse de acuerdo con el tiempo programado, obteniendo precisamente al final de la transfusión nuevamente todos los signos vitales y de encontrarse alguno con alteración deberá de igual manera reportarse al médico tratante.

Cuando exista algún signo o síntoma durante la transfusión deberá notificarse de inmediato al médico tratante quien deberá realizar un estudio completo de reacción adversa a la transfusión y deberá registrarlo en el expediente clínico así como enviar un resumen de lo ocurrido hacia el Banco de sangre que proveyó la unidad para que se estudie en conjunto la posible causa.

 

Se evitará elevar la temperatura del concentrado eritrocitaria con medios físicos, cómo es la exposición directa a objetos de temperatura elevada de tal manera que en condiciones normales y sin urgencia el concentrado eritrocitario se deberá transfundir a la temperatura de recién extracción del refrigerador del servicio de transfusión, es decir aproximadamente entre los 6 y 10 grados Celsius, cuando eleve la temperatura, se tendrá el riesgo de provocar hemólisis o rupturas celulares y consecuente liberación de hemoglobina y otras proteínas qué provoquen daño renal.

Si en el momento de extraer la unidad de concentrado eritrocitario del refrigerador del servicio de transfusión percibe que el sobrenadante se encuentra de color naranja o rojo evite transfundir la unidad y deseche la de inmediato como RPBI.

 

Siempre que vaya a iniciar una transfusión en un corto tiempo se verificará todos los datos del paciente y los datos de la unidad a transfundir y cualquier información que no cumpla algún requisito podrá ser motivo de suspender la transfusión además del aviso al Banco de sangre para su aclaración.

Al momento de terminar la transfusión de concentrado eritrocitario, deberán nuevamente iniciar la infusión con solución salina isotónica y de ser necesario podrá continuar posterior a 20 minutos con los medicamentos prescritos.

 

En caso de que el paciente presentara alguna reacción adversa a la transfusión y el médico tratante indique la suspensión definitiva deberá resguardar el remanente de la unidad al mismo tiempo que deberá llamar al Banco de sangre para que acudan por ella y obtengan un nuevo tubo piloto como parte del protocolo de estudio de evento adverso a la transfusión.

Cuando termine la transfusión del concentrado eritrocitario, deberá hacer los registros necesarios en el expediente clínico, hoja de registro de enfermería y notificar al encargado de llenar el registro del libro de ingresos y egresos del servicio de transfusión que la unidad ha sido transfundida o desechada por algún motivo.

 

3.2 Plasma.

 

Es muy importante recordar que el plasma es un componente sanguíneo que al momento de ser fraccionado posterior a la donación se introduce en un congelador hasta alcanzar menos 30 grados Celsius de temperatura y una vez que se solicita un plasma se verifica la disponibilidad en el Banco de sangre, el personal la extrae del congelador, se comienza el proceso de descongelación y se hacen las pruebas cruzadas obteniendo muestra de la guía de la unidad; por ningún motivo se debe volver a congelar debido a que las proteínas plasmáticas pierden su constitución original; de tal manera que cuando un servicio de transfusión hospitalario solicita un plasma un Banco de sangre y este ha iniciado el procedimiento no se podrá volver a utilizar para otro paciente cuando se cancela.

 

En condiciones ideales, el servicio de transfusión deberá solicitar las unidades de plasma al Banco de sangre con programación, es decir el médico tratante podrá indicar 2 o 3 unidades de plasma con intervalos de 2 a 3 horas hasta lograr la dosis ideal del paciente de acuerdo al sexo, edad, peso, talla y condiciones patológicas; cuando se solicite al Banco de sangre todos los plasmas al mismo tiempo podrán ser almacenadas en un período muy corto de tiempo que no exceda más de 3 a 4 horas en el refrigerador del servicio de transfusión, tiempo después del cual deberán ser descongeladas y transfundidas o en un momento dado desechadas por RPBI.

 

Si se reciben las unidades de plasma en estado sólido y requieren ser transfundidas de inmediato deberá colocarlas de 3 en 3 unidades, dentro de una bolsa de plástico gruesa asegurarse de que no tiene perforaciones, y deberá sumergirla dentro de un contenedor con 2 a 3 litros de agua cuya temperatura oscile entre los 20 y 25º Celsius, y deberá hacerle recambios cada 5 minutos hasta que perciba que las unidades de plasma se encuentran totalmente descongeladas, es decir en estado líquido y se evitará elevar la temperatura más de 25º Celsius a los unidades de plasma.

 

Una vez descongeladas las unidades de plasma se procederá a transfundirse de igual manera, con un equipo de transfusión por unidad percibiéndose si el contenido de la unidad se encuentra de color amarillo claro sin presencia de fibrina o de algún elemento en su interior y que se encuentre perfectamente identificado; se procederá a hacer la lista de verificación de igual manera que como con el concentrado eritrocitario anteriormente descrito y de manera convencional podrá programar la transfusión de cada unidad de plasma para 30 a 60 minutos cada uno.

Al igual que lo descrito con el concentrado eritrocitario, cualquier anormalidad detectada en los signos vitales del paciente deberá ser de notificación inmediata para su valoración, así como también deberá hacerse el registro como unidad transfundida en el libro de ingresos y egresos del servicio de transfusión expediente clínico y hoja de enfermería.

 

De igual manera, al encontrarse una reacción adversa durante la transfusión se procederá como lo anteriormente descrito en el apartado de transfusión de concentrado eritrocitario.

Los plasmas que hayan sido descongelados y que por alguna razón no puedan o deban ser transfundidos en un período de 4 horas deberán desecharse mediante RPBI.

 

3.3 Unidades de plaquetas.

 

Las unidades de plaquetas son obtenidas generalmente por un procedimiento llamado aféresis que es una técnica utilizada en extracción de sangre total, separación de plaquetas y devolución al donador de los demás componentes sanguíneos, por lo que implica un mayor tiempo y esfuerzo. Las plaquetas son células altamente especializadas con una vida relativamente corta y requieren una conservación especial, agitación continua y temperatura de 22º Celsius en condiciones normales; al igual que todos los componentes sanguíneos la unidad de plaquetas es sometida a pruebas pre transfusionales de compatibilidad y son enviadas de los bancos de sangre a los servicios de transfusión con especial cuidado en el traslado.

 

En el momento de recibir una unidad de plaquetas en el servicio de transfusión se deberá dar preferencia para su aplicación para evitar que una o varias personas mantengan la unidad en la agitación; al igual que los componentes sanguíneos descritos anteriormente se deberán obtener signos vitales, se aplicarán con equipo de transfusión de acuerdo a la norma oficial mexicana, se hará la programación del tiempo de acuerdo al volumen enviado y al término se registrarán en los documentos descritos anteriormente.

 

Al igual que una unidad de plasma, una unidad de plaquetas debe ser inspeccionada visualmente para detectar cualquier cambio del aspecto físico color presencia de cuerpos o materiales extraños en el interior y deberá evitarse la elevación de la temperatura a la unidad. es muy importante vigilar la malla o red, de la que consta el equipo de transfusión con el fin de detectar agregados plaquetarios que podemos infundir en los vasos sanguíneos del paciente; ante esta situación deberá valorarse sustituir el equipo de transfusión por uno nuevo o suspender definitivamente la transfusión de la unidad de plaquetas, en el momento en el que se detecte la presencia de agregados plaquetarios deberá notificarse de inmediato al Banco de sangre para revisar en conjunto lo sucedido y tratar de llegar a identificar el problema.

 

 

Sugerencias, quejas y felicitaciones.